El sedentarismo ha aumentado de modo
espectacular en las últimas décadas. Caminar ya no es un modo común de transporte.
El auge del sedentarismo favorece la aparición de problemas de salud tales como:
- La obesidad o la diabetes, que comienzan a muy temprana edad (a los 10-15 años) y se van desarrollando lentamente, hasta que se manifiestan al cabo de los años como una enfermedad.
- Infarto o angina de pecho.
- Pérdida acelerada de la movilidad de las articulaciones y de la fuerza muscular, cosa que empeora notablemente la calidad de vida.
La mejor manera de evitar este deterioro
es realizar ejercicio físico de forma asidua, adaptado a cada individuo; CUALQUIER EDAD ES BUENA PARA COMENZAR.
¿Por qué es conveniente
hacer deporte de forma frecuente?
1º. Porque la actividad física frecuente
protege contra el avance de varias enfermedades crónicas que comienzan desde
niños y evolucionan progresivamente. Las enfermedades más importantes sobre las
que el ejercicio físico ejerce una acción protectora son: las del corazón, las
de los vasos sanguíneos (hipertensión, accidentes cerebro-vasculares), las del
aparato digestivo (cáncer de colon) y las debidas a alteraciones del manejo de
la grasa (obesidad y colesterol alto), de los glúcidos (diabetes tipo II), y
del calcio (osteoporosis).
2º. Para evitar la pérdida de
resistencia, fuerza muscular y movilidad de las articulaciones que se da con la
edad en las personas sedentarias, y que acaba llevándoles a tener que depender
de los demás.
3º. Para mejorar su forma física, les
ayuda a bajar de peso y a sentirse mejor.
¿Qué efecto tiene el ejercicio físico regular
sobre esos factores de riesgo?
El ejercicio físico de resistencia
aeróbica practicado de modo frecuente por personas aparentemente sanas, se
suele acompañar de una disminución de la tensión arterial de reposo, de los
niveles de colesterol total en la sangre, de la cantidad de grasa corporal y de
la resistencia a la insulina. Disminuye la ansiedad y la depresión. Rebajan el
riesgo de desarrollo de una enfermedad cardiovascular y la mortalidad del
hombre de mediana edad.
¿El ejercicio físico puede tener también
efectos negativos sobre la salud?
Sí. En dos casos:
1º Si se tiene alguna enfermedad que desaconseje
hacer ejercicio físico.
2º Si se practica con desmesura, con
entrenamientos diarios, durante mucho tiempo cada día y a un ritmo muy intenso,
no mejorará la salud ni los factores de riesgo en mayor grado que si se hace
ejercicio físico con moderación; por el contrario, existirá el riesgo de
sentirse excesivamente fatigado, de tener lesiones, y se estará más expuesto a
contraer enfermedades.
¿Qué hay que hacer para que el ejercicio
no tenga efectos negativos para la salud?
Adaptarlo a las condiciones físicas de
cada sujeto.
Hacer periódicamente una valoración previa.
María Gallardo, www.mariadgallardo.blogspot.com